El 25 de septiembre del año pasado Facebook dice que se dio cuenta de que había tenido una fuga de datos que afectaba a unos 90 millones de cuentas. Decimos que Facebook dice porque una noticia así no suele darse tras una pequeña investigación para saber bien lo que pasa.
Sea como sea, ese día Facebook bloqueó las cuentas de esos 90 millones de usuarios para evitar que los maleantes se pudieran aprovechar.
Tras arduas investigaciones, la estimación de cuentas afectadas ha descendido hasta 30 millones. Para saber si tu cuenta fue una de ellas, solo tienes que ir a esta página donde Facebook informa sobre el problema e iniciar sesión en Facebook. En la parte de debajo de la página verás si fuiste víctima del ataque.
Si lo fuiste, lo primero que podrías hacer es ir a tu cuenta de Facebook, ver que apps tienes por ahí y eliminarlas o quitarles el acceso a tus datos. Para ello simplemente ve a la sección Apps en configuración.

Cómo proteger tus datos en Facebook
Además de eso, ya has hecho lo más importante: estar prevenido. Ahora sabes que alguien puede tener algún tipo de información personal sobre ti. En consecuencia, si en el futuro recibes un correo electrónico con algún tipo de chantaje en el que muestran que ese chantaje es verdad porque te dan algún tipo de información personal, ya sabes dónde pudieron haberla conseguido.
La gran mayoría de los chantajes de este tipo son falsos y el estafador no tiene manera de cumplir con su amenaza. Lo único que hace es probar suerte para ver si consigue que le pagues un rescate. Como lo hace con miles de persona, con que solo piquen algunos les merecerá la pena.
¿Qué información robaron?
Según el propio Facebook, para unos 15 millones de personas robaron el número de teléfono y la dirección de correo electrónico, mientras que para otros 15 millones aproximadamente, además de esto robaron información más amplia como: nombre de usuario, género, idioma, estatus de relación (es complicado), ciudad de nacimiento, ciudad en la que se vive, fecha de nacimiento, dispositivos con los que se entró a Facebook, estudios, trabajo, los 10 últimos lugares en los que se había entrado en Facebook o en los que se te había etiquetado, página web y personas y páginas que seguían. Por supuesto, de esta información, solo podían robar aquella que tú hubieras facilitado. Si nunca pusiste tu estado sentimental no lo pudieron robar.
¿Qué podrías esperar?
Un correo electrónico diciéndote que sabemos que estuviste aquí en tal fecha, que hiciste esto en tal otra o que tú número de teléfono es XXXXXXXXX. Ese es el gancho con el que llaman tu atención. Luego te cuentan una historia sobre algo que saben de ti y que pueden hacerlo público si no les pagas y te piden dinero.
Por supuesto, tienen muchas más opciones, pero este es uno de los timos más comunes. En principio, no les creas.