En alguna ocasión anterior ya hemos expresado nuestro convencimiento de que los antivirus para macOS son necesarios. De hecho, el convencimiento de que no existe el malware dirigido a los MacOS está bastante extendido y, actualmente, está haciendo posible bastantes daños.
En un principio, los Mac no eran tan interesantes para los creadores de Malware porque simplemente no había muchos. Pero al ser equipos muy eficientes en su rendimiento, son perfectos para la criptominería. Si a eso le sumamos que muchos Mac no tienen antivirus ni ningún tipo de protección, blanco y en botella. Los Macs son un objetivo perfecto para los que quieren minar criptomonedas con la factura de la electricidad de otros.
Según investigaciones de Sergio Pastrana de la Universidad Carlos III y Guillermo Suárez-Tangil del King’s College of London, aproximadamente el 4,3 % de la criptomoneda Monero ha sido minada con técnicas maliciosas relacionadas con los botnets.
El daño va más allá de ralentizar tu procesador
Lamentablemente, el daño del malware para Mac, que se dedica a usar la potencia de tu dispositivo para minar criptomonedas, puede ir mucho más allá que simplemente ralentizar el procesador.
Una vez que el malware consigue entrar en tu ordenador, dedicarlo a ciertas actividades secundarias no cuesta demasiado. Por eso, se ha detectado que no solo usan el dispositivo para la criptominería, sino que además trata de robar datos relacionados con webs de criptominería como credenciales de inicio de sesión y contraseñas.
Hay que tener en cuenta que robar criptomonedas es muy lucrativo. Al no ser activos reconocidos por el gobierno, difícilmente se puede poner una denuncia o conseguir una investigación.
Por insistimos en nuestra recomendación de usar un antivirus para Mac. Incluso en el caso de que no manejes criptomonedas, con tu ordenador es probable que gestiones datos personales. Una vez abierta la veda de tener los Macs como objetivo del malware, más vale proteger el dispositivo, como cualquier hijo de vecino que tiene Windows ya lleva años haciendo, que tener que lamentar una estafa u otro tipo de daño debido a un malware que se podría haber evitado.